Historia [editar]
Artículo principal: Historia de Guatemala
Época prehispánica [editar]
Parque Nacional Tikal1
Patrimonio de la Humanidad — UNESCO
Tikal la mayor ciudad del antiguo imperio maya cuenta con mas de 4000 esdificios, es el icono del periodo clasico Maya
1 Nombre oficial según Unesco
Guatemala está situada dentro del área geográfica conocida como Mesoamérica. Dentro de sus límites territoriales se desarrollaron varias culturas, dentro de las cuales se destacó la Civilización Maya. Guatemala es cuna de esta antigua civilización. Ésta fue notable por lograr un complejo desarrollo social, teniendo como consecuencia logros sobresalientes en varias disciplinas científicas tales como la arquitectura, la escritura, un avanzado cálculo del tiempo por medio de las matemáticas y la astronomía. Destacaron también en la pintura, la escultura y la ingeniería monumental, llegando a construir grandes metrópolis desde el período Pre Clásico tales como los sitios de San Bartolo, Cival, Nakbé, El Mirador, en la Cuenca del Mirador, Uaxactún, Tikal, Ceibal, Río Azul, Yaxhá, Dos Pilas, Cancuén, Machaquilá, Aguateca, en las tierras bajas del Norte, situadas en el departamento de Petén y Kaminal Juyú, en las tierras altas del altiplano central, así como Takalik Abaj en el departamento de Retalhuleu, situado en la zona costera del Océano Pacífico en el área sur.
A la llegada de los españoles a su territorio, en 1524, los mayas del período clásico habían ya desaparecido, pero los indígenas (provenientes de Tula) se encontraban divididos en un buen número de señoríos y/o ciudades-estado como Utatlán o Gu'marcaj capital de los Ki'che', Iximché, Capital de los Kakchikel, Zaculeu, Capital de los Mames, Mixco Viejo, capital de los Pokomames, Chuitinamit, Capital de los Tz'utujiles, que luchaban entre sí, lo cual fue muy bien aprovechado por éstos, para lograr una conquista con relativa facilidad, sin embargo Tayasal Capital de los Maya Itzá, y Zacpetén, Capital de los Maya Ko'woj, ambas en Petén no fueron conquistadas, luego de múltiples intentos, (Hernán Cortés, desistió de atacar Tayasal, en su camino a Honduras, debido a lo bien defendida que se encontraba), sino hasta 1697, siendo las últimas culturas de América en ser conquistadas.
Véase también: Utatlán
Colonización española [editar]
Antigua Guatemala1
Patrimonio de la Humanidad — UNESCO
Santiago de los Caballeros de Guatemala, Hoy Antigua Guatemala maximo exponente de la cultura española en el pais en su momento se considero la ciudad mas bella del nuevo mundo y fue la capital de la Capitanía General de Guatemala
1 Nombre oficial según Unesco
En 1523 los conquistadores españoles llegaron por el oeste, provenientes de México, bajo el mando del capitán Pedro de Alvarado, con la intención de explorar y colonizar los territorios de la actual Guatemala. Se enfrentaron primero con los indios k'iches, y luego se aliaron brevemente con los indios kaqchikeles, fundando su primer asentamiento el 25 de julio de 1524 en las cercanías de Iximché, capital de los kaqchikeles, villa que recibió por nombre Santiago de Guatemala en honor al apóstol mayor.
El 22 de noviembre de 1527 esta ciudad fue trasladada al Valle de Almolonga (hoy San Miguel Escobar, Sacatepéquez), debido al constante asedio que sufría por los ataques de los nativos. Ésta fue destruida en la madrugada del 11 de septiembre de 1541 por un alud de lodo y piedras que provino de la cima del Volcán de Agua (Volcán Hunahpú, como lo conocían los indígenas), sepultando a la entonces capital de la región; enterrando a la ciudad con la mayoría de sus habitantes. Entre ellos estuvo la gobernadora doña Beatriz de la Cueva, viuda de don Pedro de Alvarado. Esto obligó a que la ciudad fuera de nuevo trasladada al cercano Valle de Panchoy, unos 6 km aguas abajo, en lo que actualmente es la ciudad de Antigua Guatemala. En este lugar estaría ubicada Santiago de Guatemala, capital del «Reyno de Guatemala», hasta su traslado en 1775 al Valle de la Ermita, actual ubicación de la capital. El rey Felipe II de España y Portugal le otorgó el título de «Muy noble y muy leal Ciudad de Santiago de los Caballeros de Goathemala».
Durante la dominación española, que duró casi 300 años, Guatemala fue una región de carácter estratégico (Capitanía General del Reyno de Guatemala), formando parte del Virreinato de la Nueva España. La Capitanía General de Guatemala se extendía desde la región de Chiapas (en la actualidad pertenecient a México) hasta la actual Costa Rica. Sus divisiones políticas variarían con frecuencia, lo mismo que las fronteras entre las diversas provincias. A mediados del siglo XVII, el reino en su conjunto tenía 32 provincias, de las cuales 12 estaban en el territorio que hoy constituye la República de Guatemala: el valle de Guatemala, donde se encontraba la ciudad de Santiago, sede de la Real Audiencia; las Alcaldías Mayores de Amatique, Suchitepéquez y Verapaz, los Corregimientos de Acasaguastlán, Atitlán, Chiquimula, Escuintla, Guazacapán, Quetzaltenango, Sololá (Tecpán-Atitlán) y Totonicapán.
Esta región fue tan rica en minerales y metales como México, Bolivia y Perú. Sin embargo, los colonos explotaron principalmente la producción agrícola. Sus principales recursos fueron la caña de azúcar, el cacao, las maderas preciosas y la tinta añil para textiles. La ciudad de Santiago de Guatemala vivió un desarrollo notable en su arquitectura, caracterizada como «barroco sísmico», en la imaginería religiosa, la pintura y la música. Las festividades del año litúrgico y del santoral definían la vida de sus habitantes. La Catedral era el centro de toda la actividad religiosa, y por su rango catedralicio poseía una vida musical de gran intensidad.
El 21 de julio de 1775 fue necesario el traslado de Antigua Guatemala, siempre vulnerable a erupciones volcánicas, inundaciones, y terremotos, tras ser destruida por dos terremotos. Sus ruinas han sido conservadas como un monumento nacional. La Ciudad de Guatemala fue fundada oficialmente el 2 de enero de 1776, logró convertirse con los años en la ciudad más grande y populosa de todo el istmo.
A finales del siglo XVIII, cuando el reformismo ilustrado de los Borbones implantó el régimen de Intendencias en algunas regiones del Imperio Español, el número de provincias de la Capitanía General de Guatemala se redujo a 15, de las cuales 9 estaban en el actual territorio de Guatemala: las Alcaldías Mayores de Chimaltenango, Escuintla, Sacatepéquez, Sololá, Suchitepéquez, Totonicapán y Verapaz, y los Corregimientos de Chiquimula y Quetzaltenango.
Al promulgarse en 1812 la Constitución de Cádiz, el reino de Guatemala desapareció como unidad, y fue sustituido por dos provincias, sin subordinación entre sí: la Provincia de Guatemala, que comprendía el territorio de Chiapas, El Salvador, Guatemala y Honduras, y la Provincia de Nicaragua y Costa Rica. En 1821, durante el Bienio Liberal en España entró de nuevo en vigencia dicha Constitución, segregándose de la Provincia de Guatemala las Provincias de Comayagua (Honduras), Chiapas y El Salvador.
Independencia [editar]
En la región siguió floreciendo industrias como las del añil, el cacao y la caña de azúcar, creando grandes riquezas y permitiendo el desarrollo de otras industrias como la de los tejidos, cuyo auge duró hasta finales del siglo XVIII. Deseando crear relaciones comerciales con otras naciones, además de España, la burguesía criolla de aquella época decidió declarar su independencia, tanto política como económica, de la corona, el 15 de septiembre de 1821, aprovechando el caos político que se vivía en España. Como en la mayoría de los países iberoamericanos, la independencia de Guatemala fue un movimiento esencialmente elitista, que no supuso una mejora inmediata de las condiciones generales de vida del pueblo guatemalteco; antes bien, fue promovida fundamentalmente por las élites económica de la región para poder enriquecerse con los nuevos lazos comerciales que se esperaban adquirir, y no tanto por la separación política en sí.
Anexión al Imperio Mexicano [editar]
Guatemala en el Imperio Mexicano
Tras un breve período de incertidumbre política, el 5 de enero de 1822, las provincias centroamericanas se anexaron a México con el fin de unirse políticamente, como una estrategia para contrarrestar a la corona española. Un año más tarde Guatemala y sus provincias (Provincias Unidas del Centro de América), se separaron, excepto Chiapas que fue territorio que prefirió quedarse con México. Las regiones de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Republica de los Altos, y Costa Rica, formaron una república de corte federal, con sede en Guatemala.
Las República Centroamericana (1823-1839) tuvo una Constitución que abogaba por una forma de gobierno liberal, pluralista y republicana; pero viejas estructuras socioeconómicas conservadoras de la época se opusieron a dichos cambios, ya que les eran lesivos a sus intereses particulares, por lo que gestaron revueltas internas en cada provincia, lo que desembocó en su posterior desintegración de las Provincias y una guerra civil en la zona (1838-1840) que acabaría con la confederación de Guatemala como un estado independiente, así como los estados centroamericanos que hoy en día conocemos. Dentro de la separación que se tuvo de las Provincias Unidas de Centroamerica, Guatemala cedió el territorio de Santa Ana a El Salvador.
Finales del siglo XIX y principios del XX [editar]
Manuel Estrada Cabrera favoreció los interes de la United Fruit Co...
Posterior a la desintegración centroamericana fue Rafael Carrera y Turcios el que gobernaría como presidente de Guatemala (desde 1851 hasta 1865), apoyado por conservadores. Entre sus logros como presidente cabe resaltar el hecho de que defendiera al país de diversas invasiones extranjeras. Entre las cuales se encuetra la coalición invasora de El Salvador y Honduras, la cual fue derrotada en La Batalla de la Arada. También en el gobierno de Carrera tuvo lugar la expedición de conquista estadunidense por parte de William Walker al terrritorio centroamericano, la cual originó la Guerra Nacional contra los Filibusteros. Con el mandato de Carrera comenzaría una larga lista de Presidentes de Guatemala con dictaduras. Uno relativamente importante en esta lista fue el General Justo Rufino Barrios que impulsó la llamada Reforma Liberal de 1871 con el fin de cambiar el país, mejorar su comercio, e introducir nuevos cultivos y manufacturas, también introdujo el ferrocarril y por todo esto se le recuerda como "el reformador". Durante esta era el café se hizo un cultivo importante para Guatemala. Sin embargo y como era un dictador, creo el trabajo forzoso para los indígenas y se autoproclamó dirigente de las fuerzas armadas de centroamerica. Barrios tenía ambiciones de reunificar América Central y llevó al país a la guerra en un intento fallido de alcanzar este fin; murió en la Batalla de Chalchuapa, el Salvador, en 1885.
Para 1901 la United Fruit Company comenzó a volverse la fuerza principal en Guatemala (tanto política, como económica), durante la larga presidencia dictatorial de Manuel Estrada Cabrera. El gobierno se subordinaba a menudo a intereses de la Compañía (una de las principales de Centroamérica y que con ayuda de Estados Unidos tenía poder para cambiar gobiernos democráticos por títeres a su servicio). Mientras que la compañía ayudaba con la construcción de algunas escuelas, también obstaculizaba el comercio local; así, se opuso a la construcción de carreteras porque esto competiría con su monopolio del ferrocarril. La UFC controló más del 40% de la tierra del país y de otros países centroamericanos y las instalaciones de los puertos. El período de dictadura liberal acabaría en 1944.
La revolución de 1944 [editar]
Entrada de la sede de United Fruit Company. La multinacional frutera impulsó el golpe ante la repartición de tierras baldías.
En 1944, un grupo de oficiales militares disidentes, estudiantes, y profesionales liberales, llamados los "Revolucionarios de Octubre", derrocaron al gobierno de Federico Ponce Vaides, sustituyéndolo por una junta compuesta por el Mayor Francisco Javier Arana, el Capitán Jacobo Arbenz y el Sr. Jorge Torriello, que poco después convocó elecciones libres y democráticas que fueron ganadas por el profesor y escritor Dr. Juan José Arévalo Bermejo, que acababa de regresar de Argentina, donde se encontraba exiliado. Fue el primer presidente elegido en Guatemala después de la tiranía ubiquista (Jorge Ubico). Su socialismo fue inspirado en el New Deal americano, fue muy criticado por la clase alta y los terratenientes como comunista.
Arévalo impulsó muchas reformas y la creación de numerosas instituciones. Entre ellas se encuentra el "Código de Trabajo", el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), el Ministerio de Economía, la Junta Monetaria, la Superintendencia de Bancos, el Banco de Guatemala entre otros.
Las reformas iniciadas por Arévalo fueron continuadas por su sucesor, Jacobo Arbenz Guzmán, ganador de las elecciones siguientes.
Su fallido proyecto, una reforma agraria que buscaría aumentar la productividad de las tierras y el nivel de vida de los campesinos, fracasó. Arbenz proponía la expropiación de las tierras improductivas y su aparente cesión en usufructo a campesinos. Atacando de forma frontal y en base a expropiaciones a la United Fruit Company.
La United Fruit Company buscó la ayuda del presidente Eisenhower, argumentando, el hecho que Arbenz hubiese legalizado el Partido Guatemalteco del Trabajo. En 1952 se le presentó como un comunista peligroso. En respuesta, la CIA, organizó la "operación PBSUCCESS", que consistía en el entrenamiento y financiación de un ejército rebelde paramilitar (Movimiento de Liberación) ingresando por la República de Honduras y que dio el Golpe de Estado de 1954 derrocando a Árbenz, quien luego estuvo exiliado en Cuba, El salvador y finalmente en México donde muere. Posteriormente a Arbenz asumió la Jefatura de Estado el Coronel Carlos Castillo Armas.
Jacobo Árbenz Guzmán introdujo el ferrocarril de los Altos, totalmente eléctrico, e inicio la generación de energía geotérmica, con la planta de Zunil.
Guerra Civil [editar]
El coronel Carlos Castillo Armas revirtió muchos de los cambios realizados por Arbenz con anterioridad, llevando una política que se abanderaba como anticomunista. Fue asesinado en 1957, por lo que el Congreso de la República hubo de nombrar a presidentes interinos sucesivamente para llenar el vacío de poder dejado. Dentro de ellos se nombró el General Miguel Ydígoras Fuentes, anterior Ministro de Obras Públicas en la dictadura ubiquista y detractor de las políticas de Arévalo y Arbenz. Ydigoras formó en Guatemala a los activistas que intentaron la fallida Invasión de Bahía de Cochinos. Los boinas verdes (United States Army Special Forces) se instalaron en el país, y entrenaron a su ejército hasta convertirlo en la fuerza antiinsurgente más poderosa de América Central. Organizaciones como la Mano Blanca o el Ejército Secreto Anticomunista realizaron una actividad violenta que tuvo su paralelismo con los cruentos asesinatos y secuestros realizados por los radicales comandos de la ORPA (Organización del Pueblo en Armas). Dichos guerrilleros izquierdistas fueron patrocinados por el gobierno soviético y cubano. Dicha época fue caracterizada por excesos cometidos particularmente por el bando del ejército, financiado principalmente por el gobierno de los Estados Unidos y cuyas masacres aún son investigadas hoy en día.
En respuesta a su gobierno cada vez más autocrático, un grupo de oficiales militares, entre los que estaba Alejandro Yon Sosa, de menor rango se rebeló, intentando derrocarlo en 1960. Cuando fracasaron, varios huyeron y establecieron lazos estrechos con Cuba. Este grupo se convertiría en el núcleo de las fuerzas armadas de insurgencia que lucharían contra los gobiernos militares durante los 36 años siguientes. Sus cuatro grupos principales guerrilleros de izquierda realizaron sangrientos sabotajes económicos y ataques armados a las instalaciones del gobierno y los miembros de las fuerzas de seguridad estatal. Estas organizaciones se combinarían para formar la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) en 1982.
El gobierno de Miguel Ydígoras Fuentes acabaría en marzo de 1963 bruscamente a manos del Coronel Enrique Peralta Azurdia
1960-1996, 36 años de conflicto armado [editar]
Poco tiempo después hubo elecciones democráticas y resultó Presidente electo Julio César Méndez Montenegro en 1966. Aunque en un principio parecía haberse conseguido una democracia transparente, el ejército, que tuteló el gobierno, lanzó una fuerte campaña contra la insurgencia que rompió en gran parte el movimiento guerrillero en el campo y comenzó el conflicto civil que habría causar centenares de miles de víctimas causadas en su mayoría por los militares guatemaltecos.
Las comunidades indigenas fueron las mas afectada durante el conflicto armado interno
El Coronel Carlos Manuel Arana Osorio (1970-1974) fue el primero de una larga serie de presidentes militares, intensificándose los visos fascistas que con motivo de detener la acción insurgente y bajo la justificación del anticomunismo, se iniciaron desde 1954 con la intervención estadounidense. Posteriormente, Arana Osorio alcanzó el grado de General de División. Fue conocido por su crueldad como El Chacal.
En 1972 un nuevo grupo guerrillero se infiltró en el país desde México. En 1974, el General Kjell Lauguerud García derrotó al General Efraín Ríos Montt, el candidato del Partido Demócrata Cristiano, que ya a finales de los ochentas alcanzaría el poder y sería uno de los más corruptos que ha tenido el país. En 1978, el General Romeo Lucas García asumió el poder. En 1970 dos nuevos grupos guerrilleros patrocinados por la Unión Soviética y Fidel Castro, el EGP y la ORPA intensificaron la insurgencia contra los gobiernos militares. En 1979, Jimmy Carter, prohibió cualquier ayuda militar al ejército guatemalteco, a causa de los sistemáticos abusos de este contra la población y los derechos humanos.
A partir de la asunción del general Lucas García, Guatemala entró en un nuevo ciclo de represión. Durante 1979 y 1980 se registraron varias masacres en el interior del país, de escaso eco mediático. El 31 de enero de 1980 la situación en Guatemala pasó a ser objeto de atención mundial por el asalto de la Embajada de España y posterior asesinato de 37 personas. La embajada, situada en la 6ª calle entre la 7ª y 6ª avenida de la zona 9, en la Ciudad de Guatemala, había sido ocupada pacíficamente por un grupo de indígenas provenientes de varias aldeas del departamento noroccidental de El Quiché -un área donde la represión fue especialmente dura durante los meses anteriores- apoyados por estudiantes de la Universidad de San Carlos. Su objetivo era llamar la atención de la opinión internacional sobre una serie de masacres en sus comunidades realizadas por el ejército. Durante la ocupación de la legación, el embajador español, Máximo Cajal, exigió a las autoridades guatemaltecas por vía telefónica que no intervinieran, respetando la extraterritorialidad de la misión diplomática. Dicha petición fue reforzada por el gobierno español mediante una llamada del ministro de Asuntos Exteriores al general Lucas García, que declinó ponerse al aparato. Las fuerzas de seguridad irrumpieron en el recinto y el saldo fue de 37 fallecidos, incluyendo el cónsul español Jaime Ruiz del Árbol, el ex vicepresidente de Guatemala Eduardo Cáceres, el ex canciller guatemalteco Adolfo Molina y el padre de la Premio Nobel Rigoberta Menchú, Vicente Menchú, uno de los líderes de los indígenas ocupantes. Se salvaron, con graves quemaduras, el Embajador de España y un indígena que fue secuestrado el día después del hospital donde convalecía de sus heridas, torturado y asesinado. Su cuerpo, arrojado frente a la Universidad de San Carlos, tenía un cartel colgado del cuello con la frase "Cajal, comunista, te ocurrirá lo mismo". El gobierno español evacuó al Embajador, con la asistencia del cuerpo diplomático en Guatemala y rompió relaciones diplomáticas con el país. Unos meses después fue asesinado de 55 disparos Roberto Mertins Murrúa, director del Instituto Guatemalteco de Cultura Hispánica -actual Centro Cultural de España en Guatemala-, que había criticado en Televisión Española la actuación de las autoridades militares en el asalto a la embajada.
Durante los siguientes años, sucesivas comisiones de investigación llegaron a la conclusión, aceptada por el gobierno guatemalteco en 1984, de que las víctimas habían muerto por quemaduras producidas por granadas de fósforo blanco, asumiendo que la Policía Nacional de Guatemala era la responsable de lo acaecido y exonerando completamente a los ocupantes de cualquier responsablidad en el trágico desenlace. No obstante, hasta el día de hoy, medios afines a la ultraderecha militar siguen defendiendo que los ocupantes se autoinmolaron, y acusan en particular al embajador Cajal de connivencia con la guerrilla.
La guerra provocó el desplazamiento de 450,000 campesinos, que se vieron obligados a refugiarse en México. Dichos desplazados huyeron tanto de los guerrilleros, como de los militares, ya que ambos bandos no respetaron la neutralidad de varias comunidades.
El problema institucional relacionado con los fraudes en las elecciones, nuevamente en 1982 surgió de nuevo. El 9 de marzo de ese año el ejército era el encargado de velar por el buen desarrollo de las elecciones, varios de los "jóvenes oficiales" entre ellos, el ex candidato presidencial Otto Pérez Molina (elecciones 2007), eran los encargados de vigilar la transparencia de dichas elecciones directamente en las urnas, dándose cuenta del fraude, el 23 de marzo de 1982 dieron un golpe de Estado para evitar la toma de posesión del recién electo presidente militar Ángel Aníbal Guevara.
El General Ríos Montt se aprovechó de la situación y luego de un conveniente cambio de religión, formó una junta militar de tres miembros que anuló la constitución de 1965, disolvió el Congreso, suspendió los partidos políticos y anuló la ley electoral. Después de unos meses, Ríos Montt despidió a sus colegas de junta y asumió de facto el título de “Presidente de la República” gobernando en solitario.
Las fuerzas guerrilleras, Cuba, la Unión Soviética y sus aliados izquierdistas denunciaron a Ríos Montt. El Presidente procuró derrotar a los guerrilleros con acciones militares y reformas económicas. En mayo de 1982, la Conferencia de Obispos Católicos acusó a Ríos Montt de la responsabilidad de cultivar la militarización del país y continuar las masacres de civiles por medios militares.
El ejército de Ríos Montt y las Patrullas de Autodefensa Civil (PAC), recobraron esencialmente todo el territorio guerrillero; la actividad guerrillera disminuyó y fue en gran parte limitada a operaciones de golpear y huir. Ríos Montt ganó esta victoria parcial a un enorme costo de muertes civiles.
La breve presidencia de Ríos Montt fue probablemente el período más violento del conflicto de 36 años, que resultó en aproximadamente 60.000 muertes de civiles, en su mayoría indígenas desarmados. Aunque los guerrilleros izquierdistas y las brigadas de muerte derechistas también se dedicaron a realizar masacres, desapariciones forzadas, y torturas de no combatientes, la mayoría de las violaciones de derechos humanos fueron realizadas por los militares guatemaltecos y las PAC que ellos controlaban. Se estima que más del 80% de estos horrores los causó el ejército.
El 8 de agosto de 1983, Ríos Montt fue depuesto por su propio Ministro de Defensa, General Óscar Mejía Víctores, quién lo sucedió como presidente (Jefe de Gobierno) de facto de Guatemala (Ríos Montt sobreviviría para fundar un partido político, FRG). El General Mejía permitió un regreso controlado de la democracia en Guatemala, comenzando con una elección el 1 de julio de 1984 para una Asamblea Constituyente para redactar una constitución democrática. El 30 de mayo de 1985, después de 9 meses del debate, la Asamblea Constituyente terminó de redactar una nueva constitución, que entró en vigor inmediatamente. El Lic. Vinicio Cerezo, un político civil con amplio récord de fue candidato a presidente por la Democracia Cristiana, ganó la primera elección sostenida bajo la nueva constitución con casi el 70% del voto, y tomó posesión del cargo el 14 de enero de 1986.
1986 a 2001, democracia e inestabilidad [editar]
Luego de su toma de posesión, en enero de 1986, el Presidente Vinicio Cerezo anunció que sus prioridades serían terminar la violencia política y establecer el gobierno de ley. Las reformas incluyeron nuevas leyes del hábeas corpus y amparo (protección ordenada por tribunal), la creación de un comité legislativo de derechos humanos, y el establecimiento en 1987 de la Oficina del Procurador de Derechos Humanos. La Corte Suprema también emprendió una serie de reformas para luchar contra la corrupción y mejorar la eficacia de sistema legal.
Con la elección de Cerezo, los militares se alejaron del gobierno y regresaron al papel más tradicional de proporcionar seguridad interna, específicamente luchando contra insurgentes armados. Los primeros 2 años de la administración de Cerezo se caracterizaron por una economía estable y una disminución marcada en la violencia política. El personal militar insatisfecho hizo dos intentos de golpe en mayo de 1988 y mayo de 1989, pero el mando militar apoyó el orden constitucional. El gobierno fue fuertemente criticado por su falta de voluntad para investigar o perseguir casos de violaciones de derechos humanos.
Los últimos 2 años del gobierno de Cerezo también fueron marcados por una economía en declive, huelgas, marchas de protesta y acusaciones de corrupción extendida. La incapacidad del gobierno de tratar con muchos de los problemas nacionales -como mortalidad infantil, analfabetismo, salud y asistencia social deficientes, y niveles crecientes de violencia- contribuyó al descontento popular.
El 11 de noviembre de 1990 se celebraron elecciones parlamentarias y presidenciales. Después de una votación de segunda vuelta con sólo dos candidatos presidenciales, el ingeniero Jorge Serrano Elías asumió la presidencia el 14 de enero de 1991, completando así la primera transición de un gobierno civil electo democráticamente a otro. Como su partido, el Movimiento de Acción Solidaria (MAS) ganó sólo 18 de los 116 asientos del Congreso, Serrano firmó una débil alianza con los Demócratas Cristianos y la Unión del Centro Nacional (UCN).
El 25 de mayo de 1993, Serrano disolvió ilegalmente el Congreso y la Corte Suprema y trató de restringir las libertades civiles, según afirmaba para luchar contra la corrupción. El “autogolpe” fracasó debido a protestas unificadas y fuertes por la mayoría de elementos de la sociedad guatemalteca, la presión internacional, y la imposición del ejército sobre las decisiones del Tribunal de la Constitucionalidad, que gobernó contra el intento de golpe. Ante esta presión, Serrano huyó del país dos semanas después de este "Autogolpe".
El 5 de junio de 1993, el Congreso, de acuerdo con la constitución de 1985, eligió al Procurador de Derechos Humanos, Ramiro de León Carpio, para completar el período presidencial de Serrano Elías. De León, no era un miembro de ningún partido político y carecía de una base política, pero gozaba de un fuerte apoyo popular, lanzó una ambiciosa campaña anticorrupción para “purificar” el Congreso y la Corte Suprema, exigiendo las renuncias de todos los miembros de ambos cuerpos.
A pesar de la resistencia considerable del Congreso, la presión presidencial y popular condujo a un acuerdo en noviembre de 1993]] entre la administración y el Congreso, intermediado por la Iglesia Católica. Este paquete de reformas constitucionales fue aprobado por el referendo popular el 30 de enero de 1994. En agosto de 1994, un nuevo Congreso fue electo para completar el período no vencido. Controlado por los partidos Frente Republicano Guatemalteco (FRG) encabezado por el ex-General Ríos Montt, y el centro-derechista Partido de Avanzada Nacional (PAN).
Bajo el gobierno de De León, el proceso de paz, ahora con la participación de las Naciones Unidas, tomó la nueva vida. El gobierno y la URNG firmaron acuerdos sobre derechos humanos (marzo de 1994), el restablecimiento de personas desplazadas (junio de 1994), esclarecimiento histórico (junio de 1994), y derechos indígenas (marzo de 1995). También hicieron un progreso significativo sobre un acuerdo socio-económico y agrario.
Álvaro Arzú Yrigoyen firmo el 29 de diciembre de 1996 los acuerdos de paz poniendo fin al segundo conflicto armado mas largo de América
Las elecciones nacionales para presidente, el Congreso, y oficinas municipales fueron sostenidas en noviembre de 1995. Con casi 20 partidos que compiten en la primera ronda, la elección presidencial llegó hasta una segunda vuelta el 7 de enero de 1996 en el cual el candidato del PAN, Álvaro Arzú Irigoyen derrotó a Alfonso Portillo Cabrera del FRG solamente por un 2% de los votos. Arzú ganó debido a su fuerza en la Ciudad de Guatemala, donde había servido antes como alcalde, además del área circundante urbana. Portillo ganó en todos los departamentos rurales excepto Petén. Bajo la administración de Arzú, se concluyeron las negociaciones y, el 29 de diciembre de 1996, el gobierno firmó los Acuerdos de Paz, que terminaban un conflicto de 36 años.
Portillo fue criticado durante la campaña por su relación con el presidente del FRG, ex-General Ríos Montt, el Presidente de facto de Guatemala en 1982-83. Muchos acusan que algunas de las peores violaciones de derechos humanos del conflicto fueron cometidas conforme al gobierno de Ríos Montt.
El presidente Alfonso Portillo prometió mantener lazos fuertes con los Estados Unidos, y participar activamente en el proceso de integración en América Central y el Hemisferio Occidental. Juró apoyar la liberalización continua de la economía, aumentar la inversión en capital humano e infraestructuras, establecer un banco central independiente, e incrementar los ingresos por la imposición de recaudaciones fiscales más estrictas, en vez de aumentar impuestos. Portillo también prometió seguir el proceso de paz, reformar las fuerzas armadas, sustituir el servicio de seguridad militar presidencial por uno civil, y reforzar la protección de derechos humanos. Designó un Gabinete pluralista, incluso miembros indígenas y otros no afiliados al Frente Republicano Guatemalteco, el partido gobernante. Culmino su gobierno acusado de cometer grandes actos de corrupción.
A partir de 2001 [editar]
El progreso en la realización de la agenda de reforma de Portillo fue lento durante su primer año en función. Como consiguiente, el apoyo público al gobierno se hundió casi a niveles récord a principios de 2001. Aunque la administración se concentró en cuestiones como la toma de la responsabilidad estatal en casos pasados de derechos humanos y apoyar los derechos humanos en foros internacionales, dejó de mostrar avances significativos en el combate a la impunidad, reformas militares, un pacto fiscal para ayudar a financiar la realización de paz, y la legislación para aumentar la participación política.
En 2004 fue electo al cargo de Presidente el abogado Óscar Berger Perdomo, apoyado por la "Gran Alianza Nacional (GANA). Su gobierno fue cuestionado fuertemente por su ineficacia contra la delincuencia organizada, pandillas denominadas "maras", la consolidación del narcotráfico (enraizada durante el gobierno anterior de Alfonso Portillo), y la fuerte migración de su población (mayormente pobre y acosada por la criminalidad). Las siguientes elecciones se han realizado en septiembre y noviembre de 2007.
En la primera ronda electoral realizada el 9 de septiembre de 2007, los partidos políticos Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), liderado por el ingeniero Álvaro Colom; Partido Patriota (PP), liderado por el General Retirado, Otto Pérez Molina, ganaron los dos primeros lugares, pasando a segunda vuelta que se realizó el 4 de noviembre de 2007 las cuales dieron como ganador a Colom quien asumió como Presidente de la República de Guatemala el 14 de enero de 2008 y que finalizará en enero de 2012.
jueves, 9 de julio de 2009
historia de gatemala
Publicado por Diego José en 12:53
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